lunes, 24 de octubre de 2011

Reencuentros

Pronto estrenaré mi aventura vistoriana por entregas. Mientras os dejo un relato a vuela pluma


Reconoció su voz. Había cambiado con los años, claro está. Ahora era la de un adulto, sin embargo ella tenía aquella voz grabada a fuego en su memoria. En el departamento de los malos recuerdos.

Levantó la cabeza y miró sobre los estantes de libros, como un animalito advertido de la presencia de un depredador. Tanto tiempo y aun ese leve escalofrío recorriéndole la espalda, le volvieron a la cabeza la humillación y las risas, el miedo perenne. Recordó de un mazazo lo horrible que es ser una niña que quiere morirse todos los días.

Estaba a unos pocos metros, ojeando las páginas de un libro. Lo miró por primera vez, sin poder creerse que no fuera un monstruo, que tuviese un rostro vulgar, casi anónimo. Solo una persona entre millones. Y sin embargo aquella voz, en un timbre más agudo, había poblado sus primeras pesadillas, le había arrancado sus primeras lágrimas. Por esa voz amanecía en una cama helada y húmedad cuando se supone que los niños ya no hacen esas cosas.

Sació su curiosidad mirándolo sin disimulo, clavándole los ojos casi con saña, esperando que levantase la cabeza del libro y la viese. Algo se le revolvió en las tripas. Recuerdos de una infancia de mierda. Toda la inseguridad, todo el miedo…todo lo que vino después. Años y años de dar tumbos entre la pena y la rabia. “Levanta la cabeza y mírame” pensó. Quería que la reconociese, quería leer en su cara que pensaba de aquel reencuentro. Quería que se sintiese mal, que se le estorbase la conciencia.

Trató de pensar seguramente nunca había sabido hasta que punto la hería. Respiró hondo, pues ya era hora de que lo supiese. Estaba allí, podía acercarse y saludarlo, podía preguntarle si se acordaba de ella. Obligarle a mirarle ahora que ya era adulta y hacerle sentir por unos segundos el peso de su odio. Devolvió el libro a su sitio y se acercó hasta él, intentando no vacilar, ignorando los consejos de su parta sensata, o tal vez cobarde, que le rogaba que lo dejase estar.

Una figurita pequeña se le coló entre las piernas. El monstruo de su infancia se agachó y cogió en brazos a un adorable mocoso. No era muy hábil calculando las edades de los críos, debía tener tres, tal vez cuatro años. De repente el verdugo se había convertido en un padre que limpiaba un churrete de la mejilla de su retoño como cualquier otro padre del mundo y ella era una roca en mitad de una tempestad de sentimientos.

Otra voz, está vez del presente, la reclamó. Un padre y su hijo salieron de la tienda para perderse entre la marea de gente. Tuvo la certeza que nunca más volvería a verlo. Se giró. El rostro que la llamaba le inspiraba buenos sentimientos. Sonrió y le dio la espalda a la puerta mientras el pasado se alejaba.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola :

Me llamo Jimena San Martín soy administradora de un sitio web. Tengo que decir que me ha gustado su página y le felicito por hacer un buen trabajo. Por ello me encantaria contar con tu sitio en mi directorio, consiguiendo que mis visitantes entren tambien en su web.

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Jimena San Martín

Lyris dijo...

Por qué mi comentario se ha ido a la mierda????

Últimamente blogger va de culo...

En fin, te decía que a mí personalmente me ha llegado y me he sentido muy identificada ya que es un tema que me ha tocado muy de cerca (por no decir que me ha hostiado en toda la cara y no lo digo en el sentido figurado...)

Nicasia dijo...

Vaya, es la primera vez que tengo Spam en el blog ¿Alguien sabe algo de esto?

Syney dijo...

Un relato corto pero intenso. Yo no he vivido niguna situación exactamente igual,pero si me ha evocado otras situaciones en la que he podido sentirme de manera similar.


(Por cierto Concha, estoy haciendo un dibujillo para tí, cuando lo termine lo subo a mi blog :3)

Laura S.B. dijo...

"Intrigado me has" hasta el final. E una situación, que de un modo u otro, casi todos hemos experimentado. Me quedé con ganas de saber los motivos.

Pd: el spam es el pan nuestro de todo blog, al menos en el mío. Puedes ignorarlo, hacerle caso, o simplemete borrar el mensaje :)

Pd2: Blogger es un jode comentarios nivel experto.

Besitos.